El Congreso local le quitará a Alvarado la Riviera Veracruzana
17 de Agosto de 2017
Manuel Carvallo / Boca del Río, Ver.
Aún sin haber entrado en funciones, el alcalde de Alvarado Bogar Ruiz Rosas ya le declaró la guerra al Congreso del Estado, al advertir que no permitirá que Boca del Río se quede con la Riviera Veracruzana, sin embargo, los residentes de la zona prefieren ser boqueños y no alvaradeños.

La Riviera Veracruzana, es esa porción de terreno que hace apenas unos años se trataba de tierras ociosas y abandonada, en el tramo carretero junto al mar, que comprende de Boca del Río hacia Antón Lizardo.

En muy poco tiempo, ese terreno conocido como La Riviera Veracruzana se convirtió en una zona residencial y comercial de enorme plusvalía, que llamó la atención de inversionistas y desarrolladores que llegaron al lugar.

Pero la zona quedó pegada junto a la cabecera municipal de Boca del Río y a 75 kilómetros de la cabecera
Municipal de Alvarado; es decir, para un empresario de la zona, lo mismo da viajar a Córdoba o Xalapa, que a Alvarado donde presuntamente se encuentra el alcalde responsable de otorgarles servicios municipales.

Para Alvarado, el verdadero interés consiste en cobrar el impuesto predial municipal a los 18 mil familias que ya habitan la zona, que representan no menos de 60 millones de pesos.

Pero debido a que La Riviera veracruzana se encuentra a 75 kilómetros del municipio de Alvarado, es que el ayuntamiento no puede otorgar servicios municipales como agua potable, alumbrado, parques y jardines, bacheo, limpia pública, porque suena inverosímil que los camiones de recolección de basura, o las brigadas de alumbrado o bacheo se vayan a desplazar 75 kilómetros para dar servicio a una petición ciudadana.

El presidente de la Confederación Inmobiliaria de Latinoamérica, Antonio Hanna Grayeb, expuso que la Riviera Veracruzana se encuentra en total abandono, porque Alvarado carece de infraestructura para dar servicios municipales y eso no lo podrá lograr ni el actual alcalde Octavio Ruiz Barroso ni Bogar Ruiz Rosas que habrá de entrar en funciones en los próximos meses, simplemente porque el municipio carece de infraestructura y logística para dar el servicio.

Por lo mismo, dejó entrever que podrían los inmobiliarios podrían presentar una iniciativa al Congreso Local para que sea este quien decida si estás tierras pueden o no pasar a ser parte de Boca del Río.

Y es que, abundó que el crecimiento de La Riviera Veracruzana se dio por la cercanía con Boca del Río al no haber fundo legal para seguir en expansión, por la riqueza de la zona hotelera, pero no por Alvarado, que no aportó absolutamente nada.

Debido a esa carencia de infraestructura, es que las playas de La Riviera Veracruzana están sucias, cargadas de basura, contaminadas y abandonadas, sin que Alvarado pueda hacer algo porque no tiene capacidad de atender siquiera la cabecera municipal.

Por el momento, la decisión sobre la nueva circunscripción territorial que podría ceder La Riviera Jarocha a Boca del Río, está en el congreso del estado, donde los diputados podrían simplificarles las cosas a los habitantes de la zona y resolverían el problema de 18 mil familias.

El representante de residentes de La Riviera Veracruzana, Facundo Robles Anguiano, explicó que para las 18 mil familias asentadas en las colonias, 9 fraccionamientos, comercios e inmobiliarias de la zona, prefieren pertenecer a Boca del Río y no a Alvarado, cuya administración, no los ha podido ayudar en nada y tampoco lo podrá hacer en los próximos años.