Manuel Carvallo / Boca del Río, Ver.

Un indigente de la tercera edad estuvo a punto de morir aplastado por los escombros de una vieja casa que se derrumbó sobre la calle Mario Molina, entre Independencia y 5 de Mayo, en pleno centro de la ciudad.

Los hechos se registraron al filo de las 07:30 horas de hoy, apenas 24 horas después de que el delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Esteban Rodríguez Flores, propusiera a las autoridades municipales mano dura para los propietarios de estos edificios históricos a fin de obligarlos a remodelar.

De igual forma propuso se legisle para comenzar a expropiar estas propiedades ya que la gran mayoría se encuentra en abandono por intestado o por problemas legales, lo que permite que estos se sigan deteriorando de manera irreversible.

"El derrumbe registrado esta mañana pudo haberle costado la vida a este indigente, lo cual gracias a dios no fue así, sin embargo será necesario derrumbarlo todo debido a que pone en riesgo a las personas que caminan por sus banquetas", señaló el comandante del Cuerpo de Bomberos Municipales de Veracruz, Adolfo Sugasti Cueva.

Señaló que como este existen cerca de 80 edificios en abandono, los cuales no sólo afectan la imagen del centro histórico, sino que por lo menos 20 de ellos ponen en riego la vida de los transeúntes que caminan por el centro histórico.

Por el momento la circulación sobre la calle Mario Molina se encuentra suspendida a la circulación vehicular en lo que se levantan los escombros con maquinaria pesada del Ayuntamiento de Veracruz.

El indigente que estuvo a punto de morir aplastado ente los escombros del derrumbe, fue lavo a una casa hogar de la diócesis de Veracruz, donde se le dio comida y cobijas.