Reflexión

Xalapa colapsada por la corrupción

José



Hoy la coyuntura es propicia para el gobernador en turno, a efecto de desterrar o dejar de solapar la impunidad que ha permeado desde siempre y tiene secuestrada a esta ciudad, con servidores municipales que han sido sirvientes sumisos de los intereses fácticos minoritarios en perjuicio de las mayorías, verbi gracia, los estacionamientos públicos que representan una vergüenza para la capital del estado
Xalapa está condenada a vivir colapsada por la corrupción y dudo mucho que ahora que llega al gobierno un político decidido a profundizar en los cambios a fondo en el estado de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, pueda cimbrarla, pues me conformo con que limpie esta bella ciudad que ha sido por siempre, refugio de auténticos bandidos que, amparados por el Estado y los sucesivos alcaldes, han hecho su agosto y que obviamente nada ha sido gratuito, o cuando más o menos, se han llevado su tajada, o han sido benefactores de las bondades de los poderosos empresarios inmobiliarios y fraccionadores.

La historia se remonta, y el gobernador panperredista lo sabe, a la época del licenciado Murillo Vidal cuando crecen en todo su esplendor los fraccionamientos “Las Ánimas”, de Justo Fernández; Coapexpan, con Villafalla y “el Ensueño”, cuyo nombre del fraccionador se me escapa, pero lo cierto es que el gobierno del Estado, con los impuestos de todos los veracruzanos, levantó el puente del ferrocarril y la avenida que lleva el nombre de aquel gobernador que también se construyó con esos recursos, dándole plusvalía a toda esa zona que era laguna natural, es decir, los fraccionadores se enriquecen y el gobierno “generoso” construye la infraestructura, en síntesis, el colapso de la capital radica en que no se respetan las normas de urbanismo para que la ciudad tenga una circulación fluida, lo que la convierte en un estacionamiento.

Además, durante el gobierno de Hernández Ochoa, Yunes Linares, fue subdirector de patrimonio del Estado, y en ese tiempo se construyen los fraccionamientos Indeco Ánimas, Unidad y Trabajo y otros más, sin que se observara la normatividad adecuada al respecto, por lo mismo, ahora estamos condenados a un aislamiento peligroso, y en caso de alguna crisis, quedaremos atrapados como viles ratas, con perdón de ellas, porque no podremos salir de la ciudad, lo que constituye, sin duda, un peligro inminente.

Más aún, durante el gobierno de Miguel Alemán Velasco, a quien, por cierto Yunes Linares acusó en su momento, de haber dispuesto de los recursos del Estado en su provecho, por aquello que los empresarios no roban por necesidad, sino por vicio, ordenó la construcción del paso a desnivel al fraccionamiento “Las Ánimas” cuando el obligado a ello era la familia Fernández , todo para beneficiar el centro comercial que es de la familia, y en donde, se comenta, está involucrado el exgobernador que, aprovechándose de la crisis económica de la familia ahora es el amo y señor
de la plaza en su conjunto, como la gasolinera.

Si bien todo lo anterior es pasado y cualquier acción ha prescrito, no menos cierto es que la voracidad de los fraccionadores de “Las Ánimas” sigue atentando contra el medio ambiente y la autoridad municipal y estatal ha sido omisa para que se detenga el hacha taladora, que sigue derribando árboles y lo peor es que no se exige que se construyan vías alternas para una movilidad adecuada en esa zona, pues incluso, el ayuntamiento acaba de concluir un puente en el fraccionamiento Monte Magno, para privilegiarlo, que lógicamente, no considero sea gratuito.

Ahora bien, si como se ve hay disposición del gobernador de atacar los problemas que afectan al estado y llevar a los tribunales a los irresponsables y corruptos causantes de la crisis financiera, lo que aquí se plantea no es económico sino de voluntad política para aplicar las leyes de urbanización y la ambiental, pues si se toleró que se construyera en el lago de ese fraccionamiento todo un cúmulo de habitaciones, con calles ahora destruidas y con el hedor insoportable en esa zona, es imperdonable que lo mismo acontezca con Monte Magno, y toda ese fraccionamiento, cuyos drenajes son arrojados a un escurridero, que con las inmundicias que contienen expanden un hedor insoportable, daño que no debe continuar por atentar contra la salud, que aquí y ahora se tolera a ciencia y paciencia de las autoridades.

En anteriores páginas de este periódico se público lo que ahora se reflexiona, por lo que esperamos, al menos, que se atienda con mediana diligencia, pues no vaya a pasar lo mismo que cuando Dante Delgado fue denunciado y encarcelado penalmente, ya había prescrito el delito y quien debería de haber sido procesado era el gobernador Chirinos Calero, por omisión inexcusable, o bien, como sucede ahora con Duarte que, pese a existir más de cincuenta denuncias en su contra los exprocuradores Murillo Karam y Arely Gómez se hicieron de la vista gorda, y las consecuencias están a la vista.

Hoy la coyuntura es propicia para el gobernador en turno, a efecto de desterrar o dejar de solapar la impunidad que ha permeado desde siempre y tiene secuestrada a esta ciudad, con servidores municipales que han sido sirvientes sumisos de los intereses fácticos minoritarios en perjuicio de las mayorías, verbi gracia, los estacionamientos públicos que representan una vergüenza para la capital del estado.

*Diplomado en amparo y derechos humanos

limacobos@hotmail.com